"Toledo regresará cuando, como nosotros esperamos, se acepte la apelación que hemos hecho a su impedimento de salida", anunció ayer el dirigente peruposibilista y ex primer ministro, Carlos Ferrero.Se trata de un anuncio inesperado, sobre todo luego de que su correligionario David Waisman declarara que "con una amenaza de esta naturaleza veo difícil que venga", en relación al proceso que dirige la jueza Carolina Lizárraga.Respecto a las declaraciones del presidente Alan García, quien dijo no ser dueño del Partido Aprista para impedir que el grupo oficialista insista en denunciar constitucionalmente a Toledo, los militantes de Perú Posible acusaron al gobierno de tener una "escopeta de dos cañones", por tener distintas opiniones en torno al mismo tema.(Edición sábado).