Quiere calmar las aguas. Ayer, la ministra de Trabajo, Susana Pinilla, aclaró que la "pequeña discrepancia" en el tema laboral que denunció el lunes involucra solamente a un asesor del Ministerio de la Producción (Produce).Asimismo, dijo que el tema ya ha sido superado, aunque recordó que le parecía una deslealtad que Gino Kaiserberger, el asesor en cuestión, pusiera en tela de juicio, públicamente, las cifras de crecimiento del empleo de diciembre pasado propaladas por su despacho.Tratando de poner paños fríos al enfrentamiento con el Produce, Pinilla manifestó que "lo único que hemos pedido es un poco de 'ubicaína', que Rafael Rey ponga en su sitio a sus asesores para que podamos trabajar tranquilamente en la perspectiva de incorporar a los 13 millones de pobres en la economía".
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