La industria del cobre en Chile vivirá un explosivo crecimiento de aquí al 2008, impulsada por inversiones cercanas a los 10,000 millones de dólares en ese período, pese a que el gobierno intenta gravar con regalías o un impuesto específico al sector.Las buenas perspectivas en el mediano plazo, por la creciente demanda liderada por China y los altos precios del cobre, han abierto la puerta para que las grandes y medianas empresas arremetan en Chile con nuevos proyectos, en un negocio que este año reportará ingresos por 14,200 millones de dólares.