Por Jaime De Althaus, analista político.La aprobación del dictamen que prorroga el Reinfo hasta el 2027 representa el fracaso del Perú en dar solución a un problema complejo. Cuando menos no se aprobó la reincorporación automática de los 50 mil excluidos, sino solo si cumplen los requisitos legales y tienen operación efectiva.Es asombrosa la facilidad con la que la presión de los informales e ilegales y la venalidad política pueden ser más fuertes que el imperativo de ordenar dentro de la ley una actividad que puede ser muy dañina y peligrosa y al mismo tiempo muy beneficiosa si se legaliza respetando estándares mínimos.Lo que vemos es el fracaso de la capacidad de formar una voluntad colectiva para resolver el problema o de sostener un esfuerzo ya iniciado. Casi lo único positivo del gobierno de Boluarte había sido la decisión de limpiar el Reinfo y formalizar a 31 mil registros antes del 31 de diciembre. Había una ruta ya trazada y en ejecución. El costo del cambio de gobierno fue la pérdida de esa voluntad política y de esa ruta. El presidente del Consejo de Ministros sigue repitiendo que el Ejecutivo no ha discutido el tema ni ha fijado posición, y al ministro actual parece que solo le interesa copar el sector Dios sabe con qué propósitos. Increíble.(Edición sábado).