En entrevista con Gestión (ver edición del 31 de octubre), la titular del MEF, Denisse Miralles, anunció que pronto habrá un "refresco total" de la gobernanza de Petroperú, es decir, la renovación de su directorio. Sin embargo, uno de los seis directores debe ser elegido por los trabajadores, porque los representa, y no por los accionistas -el Ministerio de Energía y Minas (Minem), que tiene el 60% de las acciones y el MEF, que tiene el 40% restante-. Habrá que esperar que los nombrados por el Gobierno estén en sintonía con lo esbozado por Miralles, incluido un plan de corto plazo.Para el mediano y largo plazo, el plan de reestructuración ya existe. Fue aprobado por el directorio que presidió Oliver Stark, que renunció en septiembre del 2024 (excepto el representante de los trabajadores), ante la falta de apoyo del Gobierno de Dina Boluarte. Pasaron dos meses para el nombramiento del estatista Alejandro Narváez en la presidencia del directorio, y de Oscar Vera como gerente general, quienes frenaron la aplicación del plan de reestructuración. Contrariamente a lo declarado por Narváez tras ser removido, la situación financiera de Petroperú empeoró durante su gestión, al punto que las pérdidas acumuladas a julio (US$ 299.4 millones) superaban el 50% del capital social, con lo que se situó al borde de la insolvencia. Vera también ha sido despedido. Sus reemplazos son interinos.