Han pasado 18 años desde que se anunció a Machu Picchu como una de las nuevas siete maravillas del mundo moderno. Sin embargo, ahora, New7Wonders, la fundación encargada de esta selección, emitió un comunicado advirtiendo sobre cómo "la alta presión del turismo sin gestión de sostenibilidad, el incremento de precios en servicios y bienes, el riesgo de afectación al patrimonio histórico, denuncias de prácticas irregulares vinculadas a la venta de boletos, dificultades en el transporte terrestre, así como limitaciones en las políticas de gestión y conservación" comprometerían la de- signación de la ciudadela inca al no cumplir "la implementación de estándares internacionales de preservación y gestión".Además, solicita al Estado "presentar al Centro de Patrimonio Mundial información sobre los avances adicionales de la política de flujo de visitantes, y una evaluación técnica que demuestre el cumplimiento de las condiciones para incrementar el volumen de visitas". "Es una noticia preocupante porque afecta nuestra credibilidad a nivel internacional en el mediano plazo", comenta el presidente de la Cámara de Turismo del Cusco, Carlos González, quien alerta sobre la situación que atraviesa la zona en los últimos días.