Ningún partido consolidado y con presencia en el Congreso se animó a formar una alianza electoral. Esto pese a que la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, había manifestado que no descartaba ceder su eventual candidatura. En la práctica, ni su partido ni otros consolidados como Alianza para el Progreso, Renovación Popular, Podemos Perú, Acción Popular y demás optaron por asociarse.Las alianzas fueron cuatro y provienen de partidos relativamente nuevos. Así, el menú electoral continúa siendo extenso: pasó de 43 a 32 organizaciones políticas y 5 alianzas (4 derivadas a la Dirección Nacional de Registro de Organizaciones Políticas para la evaluación correspondiente, en tanto una de ellas ha sido observada).