CAMINO AL DESPEÑADERO
4 de agosto de 2025

Por María Cecilia Villegas, CEO de Capitalismo Consciente Perú.Los resultados financieros de Petro-Perú son claros y muestran una empresa quebrada que cada año endeuda más a los peruanos e hipoteca nuestro futuro. Si Petro-Perú fuese una empresa privada, hace tiempo que hubiese sido reestructurada o liquidada porque ningún empresario mantiene una empresa que genera pérdidas millonarias año a año y cuya situación no puede revertirse en el corto plazo. Para que se haga una idea, su déficit de capital de trabajo es de US$1.000 millones.Pero Petro-Perú tiene la ventaja de ser una empresa pública, esto es, ser propiedad del Estado Peruano. O como les gusta decir a los políticos de izquierda, de todos los peruanos. El problema con esto es que, si bien suena bonito en un discurso populista, en la práctica Petro-Perú pierde nuestro dinero, todos los días. En los dos últimos años, Petro-Perú perdió US$1.896 millones. Sin embargo, la buena noticia, según su presidente, Alejandro Narváez, es que Petro-Perú "solo" perdería US$223 millones en el 2025.Los directivos de la petrolera estatal han buscado que esta regrese a operar lotes petroleros para generar recursos que la ayuden a reducir sus pérdidas, pese a que no tiene la capacidadtécnicanifinancieraparahacerlo.Más aún, tiene un impedimento legal que le prohíbe realizar proyectos que le generen pasivos, reales o futuros, mientras no pague los préstamos por la refinería de Talara.