La adversidad sigue golpeando a la puerta de Petro-Perú. El pasado 22 de mayo los gerentes y dirigentes sindicales de la refinería de Talara se reunieron para discutir las nuevas medidas de austeridad que se estaban adoptando a la luz de la ‘crítica’ situación de la empresa.Esto, pocos días después de que el presidente de la estatal, Alejandro Narváez, aseverase a la prensa nacional que Petro-Perú se encontraba "comparativamente mejor" que en gestiones anteriores.Ese no fue, sin embargo, el mensaje que la alta dirección de la empresa transmitió a los participantes de la reunión del 22 de mayo.De acuerdo al acta de la conferencia, a la que Día1 tuvo acceso, las deliberaciones se iniciaron con el reconocimiento explícito de la delicada situación de Petro-Perú, la cual continúa "operando con pérdidas", según se dijo.En ese sentido, el gerente de Recursos Humanos de la petrolera, José Manuel Rodríguez, informó que se estaba procediendo a efectuar recortes en los servicios de mantenimiento, vigilancia, transporte y atención médica.