La Fiscalía de la Nación atraviesa hoy por un conflicto sin precedentes. Dos fiscales supremas, Delia Espinoza y Patricia Benavides -pendiente de ser reincorporada-, disputan el máximo cargo al interior de la institución.La aún titular de la entidad se ha ratificado en el cargo, desde donde ha denunciado penalmente a Benavides y a sus acompañantes, del lunes 16, por su aparente ingreso violento a la sede institucional. Junto a Benavides, se les imputa a su abogado Juan Peña, la asistente Dulce Chávez Fernández, a Roger Armas Sánchez, a Huber Altamirano Tejeda y a Raúl Eduardo Vila Paz.Los cargos son usurpación de función pública, ostentación de distintivos de función o cargos que no ejercen, desobediencia y resistencia a la autoridad y grave perturbación de la tranquilidad pública en agravio de Espinoza y el Estado.No son los únicos, en los últimos 60 días, se han formulado denuncias contra un total de 26 personas. Algunas podrían tener un final previsible, como un eventual archivamiento, al interior del Congreso.(Edición domingo).