LAS ELECCIONES Y EL GASTO
20 de junio de 2025

Por Alejandra Costa, Curadora de Economía del Comité de Lectura.Además de las elecciones presidenciales, el próximo año también elegiremos a las autoridades de los gobiernos regionales y los municipios provinciales y distritales, los niveles de gobierno en los que, lamentablemente, se concentra gran parte de la ineficiencia e ineficacia del aparato estatal peruano. No hay que olvidar que, aunque un mal presidente puede causar inmediatamente graves daños al país, el efecto acumulado de cientos de autoridades locales sin capacidad y, en muchos casos, sin escrúpulos, puede ir horadando la confianza de la ciudadanía en la democracia y tornarse también perjudicial para la salud de las finanzas públicas.El Consejo Fiscal (CF) publicó ayer un informe en el que analiza los datos del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) sobre el manejo financiero de los gobiernos regionales y locales. En este, explica que la mayoría de ellos sigue las reglas que limitan sus deudas y sus gastos, pero hay un grupo, pequeño e importante a la vez, que hace oídos sordos desde el 2017 a las limitaciones a sus deudas, específicamente al saldo de deuda total (SDT).Como detalla el CF, las 26 municipalidades que incumplen esa regla fiscal representan únicamente el 1,4% de los gobiernos locales del país, pero concentran el 20% de todo lo que deben las comunas y los gobiernos regionales.La reina en esta categoría es la Municipalidad Metropolitana de Lima, que ha más que triplicado su deuda desde el 2022 y que acumula un SDT que es casi el cuádruple de sus ingresos, aprovechando que está exenta de esos topes por su calificación crediticia.