Robert Francis Prevost, de 69 años, se convirtió este jueves en el sucesor del papa Francisco y en el primer pontífice estadounidense y peruano de la historia, con el nombre de León XIV. Afable, reservado, con una imagen de moderado y visto como cercano al primer Papa latinoamericano, el pontífice 267 llega al trono de San Pedro en un contexto de posiciones diversas en la Iglesia y de creciente tensión en el mundo.Apareció en la logia de la Basílica de San Pedro vistiendo la tradicional capa roja del papado, una capa que el papa Francisco había evitado en su elección en el 2013.Prevost había sido un candidato destacado, excepto por su nacionalidad. Durante mucho tiempo hubo un tabú contra un papa de Estados Unidos, dado el poder geopolítico que ya ejerce ese país en la esfera secular.Pero el prelado, originario de Chicago, parecía elegible también porque es nacionalizado peruano y vivió durante años en el Perú, primero como misionero y luego como arzobispo.Sus primeras palabras, desde el balcón de la basílica de San Pedro, fueron para realizar un "llamado a la paz", dar las "gracias" a su predecesor y saludar en español a su "querida Diócesis de Chiclayo" (fue obispo entre el 2014 y 2023).