PATAZ, TERRITORIO SIN LEY
5 de mayo de 2025

Los recientes asesinatos de trece trabajadores mineros en Pataz, región La Libertad, no son un episodio aislado. Son la confirmación brutal de una realidad que muchos prefieren ignorar: Pataz es hoy un territorio liberado, secuestrado por organizaciones criminales que actúan impunemente, ante la inacción o incapacidad del Estado.La narrativa oficial insiste en llamarlos "mineros ilegales". Pero lo que ocurre en Pataz ya no es minería informal, ni siquiera ilegal: es crimen organizado puro y duro, armado, violento, con estructuras jerárquicas y redes de corrupción que protegen sus operaciones. A las cosas hay que llamarlas por su nombre: no son mineros, son delincuentes, sicarios, mafias criminales que usan la fachada minera para encubrir su negocio principal: la muerte, la extorsión y el dominio territorial.¿Cómo hemos llegado a este punto? Las cifras lo dicen todo: 39 muertos en los últimos años entre trabajadores, mineros artesanales y colaboradores de empresas formales. Un estado de emergencia que no ha servido para nada, una policía desbordada y superada, y una autoridad civil incapaz de recuperar el control. La impunidad campea. La violencia se normaliza. El miedo es ley.