Por Renato Mejía, socio de Vinatea & Toyama.La inseguridad alcanza niveles alarmantes, afectando gravemente a las personas y a los negocios, especialmente por el grave incremento de casos de extorsión. Las denuncias por este delito pasaron de 3.863 en el 2019 a 22.192 en el 2024 a escala nacional, según información del Sistema de Denuncias de la Policía Nacional del Perú (PNP). En Lima, en el primer trimestre de 2025 se registraron 2.656 denuncias, un 27,8% más respecto del mismo período del año anterior.La extorsión afecta a todo tipo de actividades y negocios. De acuerdo con diversos gremios, en el 2024 unos 4.000 panaderos fueron extorsionados, casi 3.000 bodegas cerraron y más de 400 colegios sufrieron extorsión antes del inicio de clases en el 2025. El 70% de las empresas de transporte formal son extorsionadas, y entre setiembre y abril del 2025, 15 conductores fueron asesinados y 20 heridos. En el sector construcción, seudosindicatos extorsionan a empresarios para no paralizar obras y a trabajadores para conseguir empleo, resultando en el asesinato de cinco dirigentes sindicales en el 2024 y 25 en total desde el 2011.