El ministro de Salud, César Vásquez, descartó renunciar a su cargo tras la muerte de, al menos, cuatro personas que se aplicaron un suero defectuoso elaborado por Medifarma. Dijo estar al tanto de los pedidos de interpelación y de censura que se alistan en el Congreso. No obstante, consideró que los congresistas quedaron "satisfechos" tras su presentación en la Comisión de Salud.