Si bien la semana pasada el precio del cobre rompió récords de US$ 5.3 por libra en medio de una coyuntura previa a su anunciada aplicación de aranceles por parte de Donald Trump, luego descendió a US$ 4.48 ante la preocupación de que, al hacerse efectiva esa medida, pueda generar una menor demanda global.Aún así, en marzo la cotización del metal rojo habría crecido cerca del 12% y en 27% en lo que val de este 2025, siguiendo una tendencia alcista que viene desde el 2021 (en que tuvo una cotización anual de US$ 4.2 por libra). En los años siguientes, siguió en esa línea (US$ 3.9 el 2022; US$ 3.8 el 2023; y US$ 4.14 el año 2024). Sin embargo, pese a esta tendencia alcista en el precio, la recaudación minera en el país se ha venido desacelerando, pues si bien logró su pico más alto en el 2021 (con S/ 24,485 millones), fue menor el 2022 (S/ 23,586 millones) y aún más baja el 2023 (S/ 16,112 millones). En el 2024, se recuperó un poco (S/18,384 millones).¿A qué se debe este freno en la recaudación en los últimos cuatro años pese a la tendencia sostenida en el precio del metal rojo en ese periodo? Para Marcial García Schreck, especialista en minería de EY-Perú, la explicación para esta desaceleración en la recaudación minera en el país está más relacionada al incremento en los costos de producción minera, como el que se ha dado para la explotación del cobre a nivel mundial después de la pandemia.Detalló que mientras, el 2019, la producción cuprífera tenía un costo de US$ 1.41 por cada libra obtenida, el 2021 ya había alcanzado los US$ 1.68; el año 2022 subió a US$ 1.89 y el 2024 fue mayor a ese monto, a razón de US$ 1.8993 por libra. Esto quiere decir un incremento del 34.31% en los últimos cinco años.