El titular del MEF, José Salardi, calificó de "aspavientos" las reacciones generadas por la designación de Pedro Chira como presidente del directorio de Perupetro S.A., la empresa estatal que promueve la inversión privada en hidrocarburos. Dado que "aspaviento" significa "demostración excesiva de espanto, admiración o sentimiento", se podría decir que Salardi también estuvo algo aspaventoso al afirmar que la decisión del ministro de Energía y Minas (Jorge Montero) de nombrar a Chira fue la "más adecuada para encaminar y mejorar la gestión de Perupetro".Los cuestionamientos a dicha designación tienen que ver con la postura estatista de Chira, así como con su paso por Petroperú, donde llegó a ocupar la presidencia del directorio (entre abril del 2023 y febrero del 2024). La petrolera estatal continúa operativa gracias a generosos rescates financieros concedidos por el régimen Castillo-boluarte. El más reciente fue solicitado por la gestión de Chira, quien lo defendió con argumentos contables para "maquillar" el monto real del pedido. Asimismo, ha atribuido a las empresas privadas la declinación progresiva de la producción petrolera peruana en las últimas tres décadas. Por tanto, cabría preguntarse si lo más adecuado sea que un funcionario que no cree en la inversión privada en hidrocarburos esté a cargo de promoverla.Perupetro también se ocupa de diseñar y convocar las licitaciones de lotes de petróleo y gas, y otorgar las respectivas buena pro. Petroperú está obligada a competir en igualdad de condiciones para obtener concesiones de lotes. Ha trascendido que la renuncia de José Mantilla a la presidencia del directorio de Perupetro se debió a que no estaba dispuesto a darle un trato preferencial a la petrolera estatal en las licitaciones, de modo que era necesario colocar a alguien más apropiado para tal fin. Por ejemplo, aún no ha concluido el proceso de adjudicación de los lotes I y VI, que Petroperú actualmente opera -a través de terceros- pero cuya concesión futura no pudo ganar.