La Contraloría General de la República cuestionó en tres informes de auditoría el proceso de contratación que aplicó el Ejército para la compra de 10.000 fusiles israelíes Arad 7 a la empresa estatal Fábrica de Armas y Municiones del Ejército (FAME). El Ministerio del Interior ha recurrido a la misma modalidad y a la misma FAME para dotarse de 7.323 fusiles Arad 5 destinados a la Policía Nacional.Incluso la Contraloría recomendó que se iniciara proceso contra cuatro funcionarios de FAME por haber favorecido a la empresa Industrias de Armas de Israel (IWI, por sus siglas en inglés), ya que adoptaron acuerdos que redujeron las ganancias de la empresa estatal.