Por César Luna Victoria, Abogado Profesor universitario. Lo peor de las tragedias es ignorarlas advertencias. Sobre la minería informal, por ejemplo. Si fuese una guerra, ¿cuál sería la batalla decisiva? Nos detenemos en la parte criminal, que es la que hace bulla. La represión del delito cuenta, pero sospecho que no será suficiente. Lo que mandará será el control de las minas. Hace rato que la minería formal reclama que se desaloje a la minería informal que ha invadido sus concesiones. El Estado debiera resolver el conflicto, que para eso está. Sin embargo, las sucesivas renovaciones del Reinfo son la mayor evidencia de que el Estado no tiene capacidad para hacer ese desalojo o no quiere hacerlo. No será pacífico y nadie quiere cargar con un muerto más. No es políticamente posible. Así de grave, pero así de claro. ¿Entonces? El hecho no es solo la invasión, sino que la minería formal concentra concesiones mineras, tanto que la minería informal no tiene dónde trabajar. Aunque no fuese cierto, eso es lo que se dice y lo que la mayoría quiere creer.(Edición domingo).