Por Gustavo Adrianzén, presidente del Consejo de Ministros.El 80 % de la población mundial vive en países en los que es legal la pena de muerte, aunque en muchos de ellos esta, en los hechos, no se aplica, como es el caso peruano a la fecha. Es claro también que en el mundo se ha visto una tendencia hacia el abolicionismo, y cada sociedad ha transitado por procesos de debate, confrontación de posiciones y, finalmente, de consensos.La pena de muerte, y esto es una verdad evidente, es uno de esos temas parte aguas en toda sociedad y en toda era, incluso en aquellas que formalmente lo tienen definido. En los hechos el debate nunca acaba y, cada cierto tiempo, ante determinada circunstancia, se reaviva la polémica y se caldean los ánimos. Dependiendo de la sensibilidad y experiencia en cada sociedad, esto puede ser gatillado por una grave incursión terrorista, un magnicidio, un caso de traición de Estado o la ocurrencia de crímenes atroces.(Edición domingo).