EN EL PAÍS DE DINA BOLAURTE
3 de febrero de 2025

Por María Cecilia Villegas, CEO de Capitalismo Consciente Perú.La gran presencia de economías ilegales es una de las amenazas más graves que enfrenta nuestro país. ¿Pero cómo logramos enfrentarlas si el Congreso representa sus intereses y la falta efectiva de Estado, la incapacidad de la policía, el Ministerio Público y el Poder Judicial les permite operar impunemente?La minería ilegal es la actividad más lucrativa de todas las economías ilegales. Solo en el 2024, se exportaron 92 toneladas de oro ilegal por un valor aproximado de US$7.000 millones. La exportación de oro ilegal ha crecido a tal punto que está muy cerca de alcanzar el volumen de las exportaciones formales que ese año llegaron a 100 toneladas.Es claro que, impulsados por el precio del oro y por la libertad que tienen para operar, la minería ilegal está creciendo desproporcionadamente. El problema no es solo que se llevan recursos sin pagar impuestos generando pérdidas de ingresos para el Estado. El principal problema es que, para poder operar, necesitan apropiarse de territorios y comprar a las autoridades locales, convirtiendo las zonas en las que operan en tierra de nadie, con altos índices de violencia, delincuencia, extorsión y tráfico de mujeres y niñas para la explotación sexual. Las actividades ilegales se amparan en milicias, grupos subversivos o sicarios, como el Tren de Aragua.