En el año 2020 un amigo de la empresaria Sada Goray decidió postular al Congreso. Ella lo llamaba, de cariño, Kike, pero su nombre completo era Enrique Alva Rojas, íntimo amigo del exesposo de Goray.Alva Rojas tenía muchas posibilidades de ganar una curul. Postulaba con el número 1 por la región La Libertad en las filas de Acción Popular. Con esos argumentos, animó a su amiga empresaria para que financie la publicidad y marketing de su campaña electoral. Estos detalles han sido narrados por un aspirante a colaborador eficaz en la Fiscalía.Goray aceptó según el colaborador. Lo hizo pensando en el futuro y los beneficios que ella y su empresa podrían obtener.Aportó un total de S/ 44,000 con el fin de utilizar a Enrique Alva en caso de que llegara a ser parlamentario.