Más de un implicado en casos de corrupción habrá celebrado las observaciones del Ejecutivo a la ley que restituye la detención preliminar sin flagrancia. El gobierno de Dina Boluarte propuso al Congreso limitar esta medida a situaciones estrictamente necesarias y en crímenes violentos, lo que impedirá a los fiscales solicitar una detención preliminar ante delitos de corrupción u otros no violentos.Aunque se presenta como una iniciativa para evitar abusos judiciales, los investigados por casos de corrupción y delitos de cuello blanco no se verían amenazados por la norma y disminuiría su intención de colaborar con las investigaciones.