Cerca de mil pescadores artesanales de Talara, Lobitos y Cabo Blanco, afectados por el reciente derrame de petróleo de Petroperú, protestaron desde las 4 a.m. de ayer frente a las oficinas de la Refinería de Talara por el grave daño al ecosistema marino costero. Según los pescadores, desde el 21 de diciembre de 2024, fecha de la declaratoria de emergencia por 90 días, las autoridades no les han brindado ninguna indemnización ni solución a sus problemas.En respuesta, los pescadores bloquearon hasta cinco accesos a las instalaciones de la refinería, obligando a que varios patrulleros de la Policía tuvieran que llegar desde Sullana para despejar la zona.