Se lava las manos en el caso de explotación sexual en el que fue asesinada, con 70 balazos, la extrabajadora del Legislativo Andrea Vidal, y no le importa que puedan presentar una moción de censura en su contra. El presidente del Congreso, Eduardo Salhuana, aseguró ayer, en rueda de prensa, que viajará a China, entre el 5 y 10 de este mes, con una comitiva de dos congresistas y tres trabajadores (dos de ellas, Saby Meza y Jaqueline Lozano, militantes de su partido Alianza Para el Progreso, APP). Mientras Salhuana daba a conocer a los periodistas, en la Sala Grau del Palacio Legislativo, que no iba a dar marcha atrás en su viaje a China, a pocos metros de él, en la Oficialía Mayor, un grupo de policías y representantes del despacho fiscal de Trata de Personas realizaban diligencias como parte de las investigaciones del caso Andrea Vidal. Pero, esto no lo perturbó en ningún momento. Y, como parte de su estrategia para evadir su responsabilidad política y no hacer caso al pedido de algunas bancadas -como Honor y Democracia y Renovación Popular- de dar un paso al costado para evitar cualquier cuestionamiento de blindaje por parte de APP, debido a que el principal involucrado, Javier Torres Saravia, es allegado a su partido, dio a conocer una lista de anuncios para maquillar el problema.