Apremiado por la cercanía del cierre de la presente legislatura, el Congreso sometió ayer a segunda votación la iniciativa para restituir la reelección inmediata de alcaldes y gobernadores regionales.Al tratarse de una reforma constitucional, como se sabe, la propuesta requería ser votada dos veces en dos legislaturas distintas y obtener en ambas ocasiones el respaldo de no menos de 87 parlamentarios. Y si bien en mayo pasado la fórmula recibió 92 adhesiones, en el camino algunas de las bancadas que originalmente la apoyaron fueron cambiando de postura. La prueba más clara de ello es la votación de ayer, donde solo 76 parlamentarios votaron a favor.La reforma, pues, no fue aprobada. Una circunstancia que quizás esté relacionada con el hecho de que su aprobación habría supuesto también la eliminación de los movimientos regionales (una idea a la que se oponen fundamentalmente algunas bancadas de izquierda), pero que es también consecuencia de otro factor que vale la pena considerar.