El domingo fue la última vez que se vio al hermano de la presidenta. Hacia las 4:30 p.m. de ese día, él se conectó a la audiencia en la que el juez Richard Concepción Carhuancho empezaba la lectura de su resolución sobre el pedido realizado por el Ministerio Público en agosto para que los investigados en el Caso ‘Waykis en la Sombra’ recibieran 36 meses de prisión preventiva. Pero incluso en ese momento era difícil determinar el paradero de Nicanor Boluarte, quien parecía encontrarse en un vehículo en movimiento con destino a quién sabe dónde. El lunes, cuando el magistrado les pidió a los investigados que dieran su ubicación exacta, él fue el único que no contestó. Sí lo hizo, en cambio, su abogado, quien señaló que "lamentablemente" no podía contactar con su patrocinado.