La última encuesta nacional realizada por Datum Internacional para El Comercio ha revelado que la popularidad de la presidenta Dina Boluarte, que presentaba desde hace tiempo niveles inéditamente bajos, lejos de haberse recuperado en este último mes, ha descendido más. La gobernante registra en todo el país una aprobación de apenas 3%, mientras que su desaprobación alcanza el 94%. Un auténtico récord.Las razones de esa pobrísima performance no son un misterio. Tienen que ver, esencialmente, con la situación de la economía y la inseguridad en el territorio nacional. Y de seguro con la ausencia de transparencia de su parte en todos los asuntos por los que está bajo la lupa del Ministerio Público, el Congreso y la prensa. Es importante, por otro lado, señalar que hablamos de un estado de cosas que tampoco podrá ser revertido con el aumento de la remuneración mínima vital, una tentación permanente de las administraciones que se encuentran en trances como el que las cifras de esta encuesta dibujan.