La crisis de Petroperú continúa agravando las finanzas públicas del Gobierno. A fines de agosto de este año, el Poder Ejecutivo se comprometió a controlar el déficit fiscal (es decir, el exceso de gastos sobre los ingresos) a un nivel de 2.8% del PBI. Sin embargo, los gastos públicos están desbordados. En octubre, por segundo mes consecutivo, el déficit fiscal alcanzó el 4.1% del PBI. Según el Banco Central de Reserva (BCR), una de las principales causas de este descontrol es el incremento de los gastos no financieros, que entre enero y octubre de 2024 crecieron un 12.8% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este aumento se debe, en parte, a la reciente capitalización de Petroperú, efectuada en septiembre.En ese periodo, el Gobierno desembolsó un total de S/6,100 millones a Petroperú por concepto de capitalización, según reportó el BCR. Esta cifra se suma a los más de S/12,300 millones que el Estado ha otorgado a la petrolera desde 2022 por conceptos de capitalización, préstamos, garantías de deuda e intereses no cobrados.