EL JUEGO SUCIO DE PODEMOS
17 de noviembre de 2024

José Luna Gálvez parece haber encontrado la fórmula para inclinar, cuestionablemente, la balanza a su favor. El huancavelicano, vinculado al negocio de universidades e institutos -más de uno con la licencia rechazada por Sunedu-, ha forjado una carrera política marcada por la sombra de la ilegalidad. Sumergido ahora en tres investigaciones fiscales ha logrado obtener una curul congresal en cuatro procesos electorales diferentes. ¿Cómo lo logra? Pasó de ser investigado en el caso Lava Jato por el pago de coimas de las empresas brasileñas Odebrecht y O.A.S. -dinero que habría usado para financiar las campañas electorales de Solidaridad Nacional (partido del que fue secretario general) en 2011 y 2014- a ser sindicado como el líder de una organización criminal conocida como los Gángsters de la Política. La Fiscalía le dio ese nombre al caso en 2008. Sin embargo, y para suerte de Luna, el Poder Judicial le dio la razón cuando solicitó cambiar la denominación de la investigación alegando que esta "dañaba su dignidad" y la de los otros involucrados. (Edición domingo).