Las cosas parecen estar de cabeza en el Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep). El gremio de maestros, cuya dirigencia está vinculada a Patria Roja y a otros movimientos de la izquierda marxista desde hace más de 30 años, parece tener hoy serios problemas con algunos de sus agremiados y también con los padres de familia, que exigen cuentas claras respecto de la calidad de la enseñanza que reciben sus hijos, también la evaluación de todos los docentes, y que se explique el uso que la dirigencia del Sutep da a sus licencias sindicales. Y aunque esto se venía venir, debido a la intransigencia del sindicato magisterial que se ha negado en reiteradas ocasiones a acudir al proceso de evaluación, convocado por el Ministerio de Educación, ayer la Central Nacional de Asociaciones de Padres de Familia (Cenapafas) expresó su disconformidad con la actitud asumida por el gremio magisterial."El Sutep está lejos de ser un paradigma para la comunidad. Esto ocurre porque su dirigencia responde a intereses políticos que han traído como consecuencia que la educación se encuentre en una situación de emergencia", sostuvo Adolfo Valdiviezo, presidente de la Cenapafas.