Un fuerte apretón de manos entre monseñor Luis Bambarén y el legislador fujimorista Carlos Raffo puso fin a los dimes y diretes en los que se enfrascaron ambos personajes en las últimas semanas. El gesto de conciliación fue producto de una reunión privada que sostuvieron ayer, por más de 30 minutos, con Mercedes Cabanillas, en el despacho de la Presidencia del Congreso. En la cita hubo aclaraciones e intercambio de opiniones y se limó asperezas.Al final, Cabanillas, Raffo y Bambarén brindaron breves declaraciones a la prensa. "La página está volteada, es un tema superado", fue lo único que dijo la titular del Legislativo, para luego invitar a ambos personajes a que se pronunciaran brevemente sobre el tema.