Carmen Burga Cachay, testigo en el caso de la presunta falsificación de firmas para la inscripción del partido País Posible (hoy Perú Posible, PP) y una de las implicadas en éste, ratificó la versión según la cual el ex presidente Alejandro Toledo sí estuvo comprometido en dicho acto, en 1998, y reclamó a la justicia que le otorgue beneficios por su colaboración.Tras negar haber entrado en contradicciones en este tema, señaló que ésa fue la imagen que los funcionarios del anterior gobierno quisieron vender de ella. Ante eso, Juan Sheput, representante de PP, restó credibilidad a estas declaraciones y la calificó de actuar como una mercenaria "que ofrece testimonios al mejor postor", ya que ahora reclama que le otorguen beneficios.