UN SABOR POLÍTICO

Hans Flury comentó que eldenominado Programa Minero de Solidaridad con el Pueblo, tiene un sabor político, si bien dijo que está dirigido a luchar contra la pobreza.Dijo que, a pesar de este aporte y la inversión social que ya vienen haciendo, los mineros exigen la presencia del Estado, que también asuma el reto de acompañarlos, "porque las empresas mineras no pretenden sustituir las obligaciones del Estado". Refirió que este acuerdo permitirá coordinar las acciones de inversión, y después les permitirá" no sólo poner el huevo de oro, sino cacarear por lo que hemos hecho".