Uno de los principales nombres que el Poder Ejecutivo baraja para reemplazar a Oliver Stark en la presidencia de PetroPerú es el del economista Alejandro Narváez Liceras, profesional reconocido por su filiación nacionalista. Ayer, mientras esta versión tomaba cuerpo, los titulares del MEF, José Arista, y del Minem, Rómulo Mucho, explicaban ante la Comisión de Energía y Minas del Congreso las razones por las cuales el Ejecutivo volvió a salir al rescate de la empresa estatal.Es oportuno resaltar que Narváez, natural de la provincia apurimeña de Antabamba, defensor de las medidas estatistas, ha cuestionado la propuesta de implementar un administrador privado o PMO (Project Management Office) para gestionar la empresa, un proceso que ya se encuentra avanzado."Mi sueño es reinventar a PetroPerú", dijo en un reciente conversatorio desarrollado en la Universidad San Marcos, donde compartió cabecera con el exviceministro de Hidrocarburos Enrique Bisetti. Tanto Narváez como Bisetti tienen algo en común: ambos se han entrevistado con la presidenta Dina Boluarte para solicitar un puesto en el Gobierno, bajo los auspicios de Óscar Vera, extitular del Minem y hombre de confianza de Boluarte.Trascendió que, para completar esta terna, Narváez habría propuesto a dos exfuncionarios afines a Óscar Vera: Isabel Tafur, expresidenta de Perú-Petro, y el geólogo Aurelio Ochoa, actual director de Osinergmin y asesor de Vera durante su paso por el Minem. Asimismo, fue presidente de Perú-Petro durante el gobierno de Ollanta Humala.