Jorge Luis Salas Arenas rubricó en una resolución de este año el trauma que le provocó presidir el Jurado Nacional de Elecciones (JNE). El magistrado ordenó levantar un cerco de cinco metros de alto que proteja la sede de Jesús María -donde despacha- de iracundas manifestaciones, como las que se registraron en la última campaña de 2021. El costo económico pareció importar poco, porque el Estado gastará la exorbitante suma de S/1’500,000 para su construcción. El JNE se convertirá en una fortaleza impenetrable.La idea de un muro antiprotestas fue aprobada por Salas Arenas en 2022.(Edición domingo).