No hay nadie en el Perú que se sienta más cómodo, seguro y protegido que Vladimir Cerrón. El inubicable líder de Perú Libre se burla de todos: de la presidenta Dina Boluarte; del presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén; del ministro del Interior, Juan José Santiváñez; e incluso de la misma Interpol.El prófugo no solo se conecta vía la red social X para opinar sobre asuntos políticos que le interesan, atacar a sus detractores o celebrar con sus correligionarios un aniversario más de su partido político, sino que ahora también utiliza TikTok para participar en conferencias y dar discursos sin que el servicio de inteligencia ni la Policía Nacional lo puedan ubicar.(Edición sábado).