Este fin de semana, el plazo señalado por el todavía presidente del directorio de Petro-Perú, Oliver Stark, para que se aprobase el plan de reestructuración que él y su equipo habían planteado al gobierno se cumplió y, salvo por versiones preocupantes, nada se supo de la posición del Ejecutivo al respecto.Estas versiones, dicho sea de paso, afirmaban que se les había pedido la renuncia a los miembros del directorio y que la presidenta Dina Boluarte estaba decidida a colocar a Pedro Chira en el puesto de Stark, a Óscar Vera como gerente general de la empresa y a Enrique Bisseti como viceministro de Hidrocarburos. Hablamos de tres personas que arrastran una pesada mochila en el específico asunto que, de acuerdo con los trascendidos, se les pretendería encargar ahora.