Tras el pedido con visos de exigencia que hizo el presidente Alan García en la víspera, el Congreso cogió el guante y decidió --al menos en la Junta de Portavoces-- que la pena de muerte para los terroristas será un tema que debatirá el pleno antes del término de esta legislatura ampliada, que acaba el 19 de enero.Aunque este anuncio lo hizo el vocero aprista Javier Velásquez Quesquén, hay que recordar que esta misma junta acordó semanas atrás seguir con la reforma judicial, aunque el asunto ya se volvió a entrampar.Si algo quedó en claro es que se está muy lejos de tener consenso, ni siquiera en la forma de abordar tan espinoso asunto.Velásquez señaló que se pedirá a los presidentes de las comisiones de Constitución y Justicia que estudien sin más demora la iniciativa legal.No obstante, indicó que, si no hubiera dictamen, "vamos a exonerar a este proyecto de ley de ese requisito para que se discuta directamente en el pleno".