El contralor Genaro Matute puso ayer nuevamente sobre el tapete la posibilidad de institucionalizar en el país los denominados "juicios de residencia" para los ex mandatarios. Explicó que esta modalidad, aplicada cuando un presidente de la República culmina su régimen, permitiría que sus actos sean sometidos al escrutinio y se sancione eventuales irregularidades sin que se alegue persecución política.Además, de implantarse estos "juicios de residencia", el funcionario público no podría abandonar el lugar donde desempeñó el cargo ni asumir otro hasta que todos sus actos sean sometidos a revisión, señaló a la agencia Andina.