El Parlamento le sopló ayer la pluma al Gobierno en el controvertido tema de las altas remuneraciones de los funcionarios públicos. A este le corresponderá fijar la novísima unidad remunerativa del sector público (URSP) que será la referencia para el sueldo desde el presidente de la República hasta los alcaldes distritales, pasando por los parlamentarios.Si el Gobierno no observa esta confusa ley que fue aprobado con solo 55 votos de los 118 congresistas hábiles se espera que en los primeros días de mayo se conozca la nueva escala remunerativa de los altos funcionarios o a futuro no se resuelva nada.