La luz verde se podría dar en otro escenario, y con el respaldo de menos votos. Después de casi un mes de haberse aprobado en primera votación el dictamen de la ley que precisa la prescripción de los delitos calificados de lesa humanidad, la segunda votación que quedó pendiente ya no se realizaría en una sesión del Pleno, con la participación de 130 congresistas, sino en la Comisión Permanente. Esta vez, la decisión de aprobar la referida ley que dejará sin efecto los delitos calificados como de lesa humanidad, ocurridos del 1 de julio de 2002 hacia atrás, ya no dependerá de la voluntad de la mayoría de los 130 legisladores presentes en el Pleno -como pasó en la primera votación del 6 de junio que se aprobó con 60 votos-. Esta vez se requerirá, según el reglamento, solo de la mitad más uno de los 30 integrantes de la Comisión Permanente. Es decir, de tan solo 16 legisladores.