Otra buena noticia en el ámbito energético. Aparte del gas de Camisea, ya en fase de plena explotación, ahora una empresa estadounidense ha declarado con valor comercial las reservas de petróleo pesado halladas hace 8 años en el lote 67 (Loreto), con cuya producción nuestro país pasará de ser deficitario a autosuficiente en petróleo.El anuncio es extraordinario, no solo por el nivel estimado de producción (100 mil barriles diarios) sino también por las inversiones comprometidas para la explotación, calculadas en 1.000 millones de dólares y porque se ha firmado contratos con otras empresas en la misma zona.Todo esto demanda del Gobierno y de los otros poderes públicos una gran responsabilidad. Ante todo, para mantener la estabilidad política y económica y garantizar la seguridad jurídica, lo cual es fundamental para atraer inversiones y consolidar estos contratos. Hay que recordar aun sector del Apra que hace pocos meses proponía revisar contratos, que no se puede cambiar las reglas de juego de modo arbitrario y abrupto.El prospecto cercano de autoabastecernos de petróleo tiene, pues, que ser manejado de modo responsable. Como lo señalamos en nuestros Principios Rectores (PR 10,v), "la naturaleza está para ser usada, pero no abusada. Dentro de ese marco, denuncia los abusos contra el medio ambiente, pero también los eventuales excesos de los grupos ambientalistas". En tal escenario, a la hora de detallar los contratos tiene que considerarse tanto la protección del ecosistema para mantener a raya los niveles de contaminación, cuanto los derechos de las comunidades indígenas, cuyas preocupaciones deben tener un cauce formal de comunicación, para evitar posteriores desencuentros.