La exclusión de los movimientos regionales -añadida a la propuesta de la reforma constitucional que permite la reelección inmediata para alcaldes y gobernadores- sigue motivando controversia y rechazo por parte de la opinión pública y una nueva amenaza del sur altiplánico de organizar una quinta marcha violenta a la capital de la República.Para el jurista liberal Enrique Ghersi la exclusión, aun fuera en primera votación, de los movimientos regionales de las próximas contiendas políticas, "es flagrantemente inconstitucional porque limita el derecho a la participación política".