La Cuarta Sala Civil que preside el vocal Ángel Romero, electo presidente de la Corte de Lima para el periodo 2007-2008, podría fallar en pocos días a favor de 32 ex empleados del Banco Central de Reserva que hace 14 años renunciaron bajo incentivos y que ahora pretenden reintegrarse y cobrar S/.60 millones por los años no trabajados.Esta demanda, sin embargo, no fue aceptada por el Ministerio de Trabajo, la Corte Suprema ni el Tribunal Constitucional, pero a pesar de ello sí fue admitida en la Sala de Romero, donde en una primera votación, que no generó un fallo por no haber mayoría, dos vocales se inclinaron a favor de los ex empleados y dos en contra.Al llamar a un dirimente, este se inclinó por anular todo lo actuado, es decir que no le dio la razón a ninguno de los vocales. Por eso se llamó a otro dirimente, que será la jueza Ida Rodríguez. Antes de ella, había sido elegida la magistrada superior Victoria Niquén, pero extrañamente fue relevada.