Por Mario Saldaña, periodista.La nueva rebaja de calificación crediticia a PetroPerú realizada por Fitch Ratings es una ruta sin retorno. Esta fue asignada incluso luego de conocerse el propósito del Gobierno de incorporar una gestión privada a la compañía.El MEF ha emitido una carta garantizando el soporte financiero del Ejecutivo en diversas modalidades, cuando se sabe que la crisis de liquidez que atraviesa la petrolera obliga, en lo inmediato, a un nuevo aporte no menor a los US$2.200 millones, adicionales a los ya efectuados meses atrás.Siguiendo la opinión de los expertos y conociendo que hay un grave problema de sobreendeudamiento estructural, lo mejor que podría hacer el Gobierno es sincerar las cosas y darle al país una alternativa seria, técnica y sostenible.