Por María cecilia Villegas, CEO de Capitalismo Consciente Perú.La publicación de las cifras que demuestran el aumento de la pobreza en nuestro país ha sido un duro golpe, pero es también un llamado a la acción y una oportunidad para encauzar el país hacia el desarrollo. Los políticos no tienen los incentivos adecuados para hacerlo y, por ello, es claro que son los líderes empresariales los llamados a guiar el camino. Porque, como decía De Gaulle, la política es un asunto demasiado serio como para dejarla en manos de los políticos.Para lograr reducir la pobreza se requiere un clima de inversión favorable, ya que la inversión privada genera crecimiento económico, contribuye con la recaudación fiscal y crea puestos de trabajo que son lo que les permite a las familias obtener mayores ingresos, escapar de la pobreza y tener una mejor calidad de vida.En los últimos diez años, el sector minero ha representado el 12% del PBI anual y contribuyó con el 10% del total de tributos recaudados. Solo en el 2023, la minería aportó S/12.650 millones en impuestos y S/7.665 millones por canon, regalías y derechos de vigencia y penalidad. La minería es clave para el desarrollo del país porque, además de contribuir de manera importante con los ingresos fiscales, genera crecimiento económico, dinamiza el empleo y reduce la pobreza.