En 2023, la pobreza monetaria afectó al 29% de la población en el país, lo que afectó a más de 1.4 millones de niños, lo que equivale a dos de cada cinco infantes viviendo en condiciones precarias, según el Infobarómetro de la Infancia y la Niñez. En cuanto a la pobreza extrema, aunque este problema afecta a casi dos millones de personas, 280,000 de ellos son niños. ¿Qué implicancias tienen estas cifras? Una de las consecuencias es la anemia, ya que el 43.1% de los niños hoy la padecen.