Desde hacía tiempo que se hablaba de la venta de Anglo American, la veterana de 107 años y otrora una de las mayores mineras del mundo. El 25 de abril, la especulación se transformó en detalles cuando BHP, la gigante de US$ 140,000 millones en valor de mercado que hoy lidera la lista, ofreció adquirirla por US$ 39,000 millones (excluyendo las operaciones de Anglo American en Sudáfrica).Posteriormente, se supo que el fondo de coberturas activista Elliott Management, conocido por adquirir participaciones en gigantes adormiladas para desenterrar valor, había amasado US$ 1,000 millones en acciones de Anglo American, con lo que consiguió el 2.5% del accionariado. En los días que siguieron, elevó ese porcentaje ligeramente, quizás confiando en que otros inversionistas se sumasen y provocasen un alza en el precio de la acción.Esto indica que Anglo American posee algo digno de ser disputado. En efecto, sus inmensas minas cumplen todos los requisitos: alta calidad y bajo costo, con potencial de expandirse. Además, están extrayendo lo idóneo en el momento preciso. Uno de sus principales productos es el cobre, altamente demandado pues será necesario para la electrificación del transporte y la transición energética.