"¿Cómo podemos alegrarnos por la megaobra cuando no tenemos salud, seguridad ni tranquilidad? Estamos totalmente abandonados", cuestionó Julissa Vite Olivos, desde el sector de Peralvillo, por donde se construye el túnel del puerto de Chancay que será un viaducto subterráneo de 1.820 metros de largo.Este es el sentir de muchos vecinos que protestan cada vez que llegan los ministros al distrito de Chancay, ubicado en la provincia limeña de Huaral, donde será inaugurado -en noviembre próximo- el megapuerto que promete convertir al Perú en la principal puerta de comercio entre Sudamérica y Asia.